Las manzanas serán naranjas.

Nuestro paradigma está próximo a su extinción, su reloj interno está a un par de minutos del despertador. Los seres humanos estamos a un paso del cambio de paradigma, nos envuelve la sensación de salto antes de zambullirnos en la piscina de la consciencia galáctica. La tierra palpita ante tal hecho, su corazón se acelera ante el tránsito al nuevo paradigma. Poco a poco todo se desmorona como un castillo de naipes; las ilusiones de los codiciosos y los dormidos se destruyen, eso les irritará, pero es la única manera de que el universo trabaje íntimamente y directamente con nosotros. El día de la galaxia se agota y ya se observa la luz de un amanecer resplandeciente en el horizonte de nuestro despertar. Las palabras bellas no tan solo nos demuestran un buen sonido en nuestra mente, la belleza no quita el significado que se desea expresar, sino que lo magnifica de una forma exponencial, dando un resultado bello y útil. Al igual que las palabras nos hacen comunicarnos de forma escrita y verbal, nosotros nos comunicamos con el universo a través de frecuencias al igual que el con nosotros al pasar el filtro del paradigma actualmente impuesto. Nuestro paradigma ya no puede filtrar ninguna frecuencia, ante ello el universo nos brindará la luz galáctica y nuestro paradigma quedará destruido y renovado, las manzanas serán naranjas.

Moraleja 5: "Un paradigma cae cuando otro se levanta, no hay destrucción, hay transformación".

Gracias. Carlos García Claros.