lunes, 26 de marzo de 2012

Por tí... y por mí.


Por el fuego que de mi interior nace como una avalancha de fastuosidad, el alud de los sentimientos que mi corazón vierte se sienten en el ambiente, cuando tu mirada enjaguada en mis sentires apasiona la fuerza de este amor que de toda loa, va, sube, escala y escapa más allá de la nubes.

Por el viento que tu pelo alza y menea, mientras mi espíritu se acrecienta a cual León de Nemea; la hidra de mis dudas por mi brazo y mi espada desnuda cae en el abismo de lo inocuo y lo perpetuo. Noto tus labios recorrer el cuerpo que mi piel envuelve y se desmenuza como pastel en manos de niño inquieto.

Por la tierra que mis entrañas encementa, como el ajenjo en el valle de los resucitados tras el apocalipsis de mi latir, te amo más que la madera que forja los pilares de esta caverna que a veces me salva y otras me engulle; no dejaré que el viento huracanado destruye nuestro cobijo de corazón a alma, mente, cuerpo e inclusive sexo.

Por el agua que mi garganta enfría con certera divinidad, por la fuerza que tu poder tiene en el elemento del que hablamos; yo no he llegado a otra conclusión de la cual es un TE AMO; un diluvio de pasión sentida, que en pecho tu marca deja querida.

Por tí, Sara esposa de Abraham, Princesa para los antiguos, pues no habitará en mi corazón más que tu y tu amor conmigo.

Moraleja 12: "El amor mueve"

Gracias.

jueves, 22 de marzo de 2012

Pandora, tan curiosa y tan amada


Alguna vez me hubiera gustado verla, con sus frágiles y cuidadas manos, con ese gesto curioso, abriendo en su soledad la caja de todos los males. Tan preciosa hubiera sido como cualquier persona que camina sobre la tierra, pero al mismo tiempo tan mal recordada por su acción, que la gente incluso teme al hablar de ella.

No hay miedo al mal que Pandora no provocó; pues ella no sabía lo que aquella caja contenía; no había nada más que un estímulo, un pensar, no había ni si quiera mal alguno.

¿Que caja puede contener todos los males? No hay caja que pueda poseer tanto.
Pandora, qué curiosidad te dio al abrir aquella caja que tus manos trémulas no podían mantener ¿cuál es la fuerza que le falta a todo hombre para esquivar los males de tu caja?
No tienes culpa alguna Pandora, solo los creadores de tu caja podrían poseer maldad.

Moraleja 11: "El mal no es una caja ni alguien que la abre, el mal es la persona que lo provoca"

Gracias. Carlos cgccgccgccgc@gmail.com

sábado, 10 de marzo de 2012

Absurda águila bicéfala


Una oposición absurda que crea una grieta en los cimientos de las relaciones humanas, no sirve más que para confirma ese "divide y vencerás" tan antiguo que ha calado en las raíces de toda sociedad.
El pensamiento progresista contra el conservador, el capitalista frente al comunista, la llamada derecha y la bien sabida izquierda. Todo ello no es más que una trampa, es decir, una cárcel que nos encierra y nos tortura, ideas contrarias a otras, un conflicto sin final y por tanto sin sentido.

El símbolo del águila bicéfala ha caído en el pozo de lo absurdo, debemos dejar a un lado nuestras ideas de vertedero para poder avanzar y no quedarnos en el estanque de nuestra perdición. No nos queda nada que perder, solo perderíamos la razón de ser por seguir teniendo pensamientos separadores como los que en la política se ven.
No hay ya separación, es una ilusión que desde que tus primeros procesos mentales se fueron formando te han estado vendiendo de forma gratuita. Es una droga que te hace formar parte de una idea, una idea que te reconcome e idiotiza.

No hay forma de avanzar si nuestros principios como humanos son dejados atrás; sin ideología puedes fácilmente caminar, sin tener nada que explicar. La creencia que alimenta toda esta mentira fue inventada hace ya mucho, siglos atrás, cuando el pensamiento del hombre nacía y su voz defendía lo justo y lo bueno sin tener que preocuparse de uno u otro impertinente gobierno.

Moraleja 10: "Azul y rojo lo mismo son, solo si no creemos que lo formamos tu y yo".

Gracias. Carlos García Claros.