jueves, 22 de marzo de 2012

Pandora, tan curiosa y tan amada


Alguna vez me hubiera gustado verla, con sus frágiles y cuidadas manos, con ese gesto curioso, abriendo en su soledad la caja de todos los males. Tan preciosa hubiera sido como cualquier persona que camina sobre la tierra, pero al mismo tiempo tan mal recordada por su acción, que la gente incluso teme al hablar de ella.

No hay miedo al mal que Pandora no provocó; pues ella no sabía lo que aquella caja contenía; no había nada más que un estímulo, un pensar, no había ni si quiera mal alguno.

¿Que caja puede contener todos los males? No hay caja que pueda poseer tanto.
Pandora, qué curiosidad te dio al abrir aquella caja que tus manos trémulas no podían mantener ¿cuál es la fuerza que le falta a todo hombre para esquivar los males de tu caja?
No tienes culpa alguna Pandora, solo los creadores de tu caja podrían poseer maldad.

Moraleja 11: "El mal no es una caja ni alguien que la abre, el mal es la persona que lo provoca"

Gracias. Carlos cgccgccgccgc@gmail.com

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