sábado, 25 de julio de 2009
Segundo debate: El odio y el amor.
ODIO- Buenas.
AMOR- Buenas.
YO- Empieza el amor ya que alfabéticamente es anterior al odio. Asi que cuando quieras, querido amigo.
AMOR- Bueno, he venido amablemente, ya que nos conocemos desde hace tiempo y quería dejar claro lo que soy y además darte las gracias por haberme llamado.
YO- De nada.
AMOR- Bueno mi objetivo es no tener ningún objetivo en concreto, es decir, no vengo aqui a declarar que estoy por encima del odio y mucho menos a pisotear sus palabras; solo voy a poner el estandarte del "porqué" misericordioso de todos los actos que hago día a día. La gente, me siente, me llama, algunos me definen como un cantar milagroso y otros como un clamor doloroso, mi camino desemboca en un solo destino, unir mentes, almas y corazones sin dolor alguno. Mi existencia se relata en una mera frase, "hacer convergir dos existencias terrenales", es decir, dos vidas; siempre para deleite de las personas.
YO- ¿Con qué fin? ¿deleitar a las personas?
AMOR- Al decir "deleitar a las personas" me refiero a hacer que dos o más existencias se encuentren bien consigo mismas y entre sí. A la pregunta que has formulado, la respuesta es que no hay fin en mi misión, mi propósito llega más allá de la muerte; pocos sentimientos y pensamientos pueden burlar a tal ser careciente de disfrute existencial y pasar al otro lado.
YO- ¿Es cierto que existes dentro de cada persona?
AMOR- Claro, me complemento con todos los corazones que existen, pero a veces hay personas que hechan tierra sobre su propio corazón y se convierten en huraños o depresivos, ya que en estos casos la mente ayuda a que todo caiga y sucumba en el abismo.
YO- Bueno se acabó ya tu tiempo, ahora empieza el del odio. Adelante cuando desees.
ODIO- La verdad esque no deseo hablar de mí, como a hecho mi antecesor consigo mismo pero lo haré o mas bien hablaría de él y de como es realmente. Cada día intenta matar a mis hermanas, menos mal que salgo a su protección, en realidad es un asesino constante dentro de cada unión o relación. Yo soy puro, ni me retoco ni uso tapujos, solo uso lo que debo usar para poder ser, eso quiero que quede claro.
YO- ¿Qué debes usar para poder ser?
ODIO- Quizás la venganza, que no es más que un equilibrio sin precedentes que acaba en satisfacción, creo que eso es lo que tú persigues, la neutralidad ¿no?
YO- No exactamente esa neutralidad pero bueno, prosiga.
ODIO- Mi deber es ser directo, decir cosas que solo pueden salir de bocas inteligentes y atrevidas, yo no uno varias vidas, yo más bien reuno varias situaciones y creo un hecho en la vida que consta para el resto de la misma. Dicen que soy el causante de disputas y celos pero nada tiene que ver que yo actue con lo que suceda en otro momento; congregar vidas es bonito, no le falta razón a mi oponente por decirlo así; pero amontonar situaciones capaces de parar el mismo tiempo, eso es increíble.
YO- ¿Cuales son tus objetivos?
ODIO- Hacer que todas las personas digan lo que no han dicho y se han guardado por motivo de miedo o vergüenza hacia el otro en el cajón del tedio.
YO- Bueno tu tiempo ya se ha acabado y con este el segundo debate. Quiero daros las gracias por haber venido y hasta otra.
AMOR- De nada, hasta luego.
ODIO- De nada hombre, cuídate.
Fin del bloque de entradas de debate.
PD: No publicaré otra entrada hasta Septiembre ya que las vacaciones dejan huella y debo descansar para proseguir con este blog y con más ideas interesantes.
Si desean alguna cosa sobre el blog o si han visto algo que querraís preguntarme enviar un correo eléctronico a la cuenta de "gmail" de mi blog. cgccgccgccgc@gmail.com
Gracias. Carlos García Claros.
domingo, 19 de julio de 2009
Primer debate: La verdad y la mentira.
miércoles, 15 de julio de 2009
Rapapolvos con debates en el mismo plato.
Ya que en la escritura es díficil distingir quien habla y quien calla y escucha, pondré antes de cada frase dicha por cualquier de los integrantes del debate una palabra que lo identifique como sujeto, es decir, sentimiento o pensamiento, a excepción de mí. Sopesaré mi suposición de que estaís listos para saber qué sentimientos o pensamientos van a entrar en debate.
-Primer debate:
En este debate participarán la mentira y la verdad. Carlos García Claros como director del debate. (siguiente entrada)
-Segundo debate:
En este debate participarán el odio y el amor. Carlos García Claros como director del debate. (siguiente entrada trás la del -Primer debate)
Nota: En estos debates no hay ganadores ni perdedores, solo conclusiones que haga en su mente o en su corazón el lector.
Me he esforzado mucho para convencer a la mentira, me dijo varias veces que no se presentaría en el debate ya que decía que yo le insultaba a su moral con este blog; me quedé sorprendido, le dije exactamente estas palabras, "yo no te falto al respeto insultandote y menos desprecio tu moral, solo que, prefiero representar a la verdad en este blog que a tí, lo siento... Además con este debate puedes intentar convencerme de que vales la pena, aunque ya sabes que aquí no hay ganador ni perdedor, solo conclusiones a dar", y así me dijo que estaba de acuerdo en venir pero con la condición de que se le tratara bien; le dije que no se preocupase que se le trataría bien.
Las dos siguientes entradas serán los dos debates respectivamente.
Gracias.
viernes, 10 de julio de 2009
Si el amor no viene...
Si el amor no viene le llamo para reencontrarme con él; si esta ocupado, aguardo a que esté libre; el nunca es hostil, siempre me responde con ese toque apacible de bondad, nunca miente siempre dice la verdad. Se muestra muy afable a cual deidad; la mayoría de las veces que quedo con el para tomar una copa gualda de sentimientos; me guiña el ojo, y así me da su cheque de confianza; el cual canjeo en el peaje de la autopista de mi corazón. El no quiere la razón, prefiere más bien la verdad. Me dice que reparta su número para que las personas puedan encontrarse con el; le respondo con un "claro, siempre lo he hecho así" y proseguimos con la conversación. Aclaró que día a día en el convergían millares de sentimientos; hablaba de las veces que le ha tocado correr a cual gacela en sabana de corazones, se reiteraba diciendome que había pasado horrores cuando el odio le pisaba los talones. Describió al odio, dijo que era algo imposible de ver, que solo se podía vislumbrar cuando de tal manantial de amor brotaban pizcas de oscuridad, a veces acompañadas de "las tres ias"; me quedé extrañado y le pregunté cuales eran esas "tres", a lo que me respondío "pues está claro, la avaricia, la envidia y la codicia"; me quedé sorprendido al saber que maldades venian de la mano del odio. Me contó sus "batallitas" con la mente y sus luchas con la lujuria y la infidelidad, las cuales había vencido ya varias veces y el mismo había denominado como "heces del pensamiento", me pronunció una despedida desde su anhelo y me dijo que no dudase en llamarle para lo que desease; pero que no contara mucho con él, porque estaba repleto de citas, le dije que no se preocupase y un "hasta luego" con una fuerza impetuosa y verdadera. Antes de irse me dijo que cuando vencía a los pensamientos de infortunio nunca lo hacía con maldad, sino con gratitud y bondad, porque a ellos les debía su trabajo de unir lazos, personas y seres en cuestión.
Gracias. Carlos García Claros.
jueves, 2 de julio de 2009
El caminante.
La furia y la ira se habían cansado de tanto subir por la montaña, se quedaron haciendo un "pic-nic" a medio camino, les preparé a cada una un bocadillo de caviar de soberbia, tan lujurioso como repugnante; los jinetes del apocalipsis estaban en el establo descansando después de su tan inválida lucha contra mis palabras, al observar tan bello ejemplar de la naturaleza decidí despeñar mi egocentrismo desde la cumbre, luego me aseguré de que se había caido y de que se había endiñado un buen golpe contra las rocas para proseguir cayendo por las picudas piedras de la montaña. Sentado, deleitandome con tales vistas, pensé en que debería volver a buscar a mi furia y a mi ira para ver que tal les iba; ya habian terminado de comer y estaban descansando con una rica siesta sobre las rocas grisáceas, aproveché la oportunidad y escapé hacia la libertad de sentimiento, me persiguieron día tras día, cogí trenes a todos lugares, inhóspitos páramos desérticos me esperaban para deshacerme de las dos bestias que seguían mis pisadas, ahora me refugio en un sitio cálido y tengo la certeza y el conocimiento, es decir, el poder de que aquí jamás me encontrarán, ni siquiera se preocuparan de mí, mi querida furia y mi querida ira; de todas formas que más da que vengan o no a buscarme, caeran rendidas, arrodilladas, postradas y serán corrompidas eternamente bajo sus propios suplicios, ahogaré mis propios vicios con ellas en el tarro de mi tintero, para después malgastar escribiendo tan pésimos "sentimientos".
Dedicado a la Furia y a la Ira.
PD: No me espereís esta noche, quizás no cene más en vuestra casa.
Gracias. Carlos García Claros.